En esta ocasión, comenzaremos nuestro recorrido en una playa, concretamente en la de Karraspio, junto a Lekeitio (en realidad, en el municipio de Mendexa), donde tendremos frente a nosotros la Isla de San Nicolás. Recordad que en marea baja podéis acceder a la isla andando.

A la derecha, en la carretera nos espera Lekeitio, hermoso pueblo muy ligado al mar, donde además del antiguo trazado de calles tendremos ocasión de apreciar la impresionante iglesia de Santa María y el conjunto de casas y el ambiente del puerto que lo circundan. Sin olvidar, por supuesto, el hermoso paraje natural que lo rodea.

A la izquierda del cruce situado en el centro de Lekeitio, tomaremos la carretera hacia Markina-Munitibar y, después de salir de la localidad, a 4,5 km directamente hasta Munitibar.

Atravesando parajes de evidente sabor agrícola, esto es, un hermoso paisaje salpicado de caseríos, a 9 km atravesaremos Gizaburuaga. En el límite del pueblo podemos visitar la antigua ferrería de Bengolea y, algunos kilómetros más adelante, antes de adentrarnos en Aulesti, el depósito-molino de Errotatxu.

Aunque un kilómetro más adelante ya estaremos en el municipio de Aulesti, no alcanzaremos el núcleo urbano hasta 4 km más adelante, ya que se compone de numerosos barrios.

Después de tomar a la izquierda en el casco urbano (dirección Markina), a kilómetro y medio podremos divisar ya nuestro siguiente objetivo, el monte Urregarai, donde se sitúa la ermita de Santa Eufemia. A la izquierda tenemos el rocoso alto de Bedartzandi y el valle entre ambos, donde una vez al año se celebra una famosa romería. Desde luego, aquí todo es hermoso o espectacular.

Después de atravesar los barrios de Aulesti de Zubero y Malats (ermita de Santiago), a 4,5 km del pueblo comienza el camino que nos conducirá hasta el monte Santa Eufemia, señalado a la izquierda. El primer tramo está asfaltado, aunque el final quizá lo encontréis en mal estado, así que tomadlo con calma.

Después de subir 2 km, nos hallaremos en el pequeño valle antes mencionado, teniendo a nuestra derecha la senda que conduce hasta la ermita de Santa Eufemia y a la izquierda el monte Bedartzandi, que no necesita sendas. En ambas direcciones, la vista es espléndida.

Una vez de haber disfrutado de las vistas, regresaremos a Aulesti por el mismo camino que hemos traído, tomando desde aquí la dirección de la izquierda (27 km). De camino junto al río Lea, a 3,5 km entraremos en un nuevo municipio, aunque todavía nos harán falta un par de kilómetros más para ver las primeras viviendas, aún a lo lejos. A otros 300 metros llegaremos por fin al pequeño pueblo de Munitibar-Arbatzegi-Gerrikaitz, un agradable grupo de casas formado en la Edad Media.

En el mismo pueblo, tomaremos a la izquierda, en dirección a Markina-Bolibar (si no, iríamos hacia Gernika), pero a 200 metros deberemos desviarnos a la derecha, siguiendo las indicaciones del cartel marrón del Mirador de Bizkaia. Teniendo en cuenta que nos movemos en la vertiente norte del monte Oiz, veremos que en el km 36,5 se puede empezar a subirlo, aunque nosotros seguiremos en línea recta.

A partir de este punto, comenzaremos a ver bonitas panorámicas, cuya "cúspide" contemplaremos un kilómetro más adelante, el balcón natural llamado "Mirador de Bizkaia". Desde ese lugar, tendremos oportunidad de contemplar gran parte de este territorio, desde el interior hasta la costa.

Regresando al cruce de Munitibar, a la derecha tomaremos la dirección a Iruzubieta-Markina. Como os daréis cuenta, es un camino de segunda o tercera categoría, por lo que os recomendamos que lo toméis con calma.

En el km 45, una vez pasado Gontxagarrigaina, ya podremos ver Ziortza. A través de un agradable paisaje, donde probablemente sobran algunos pinares, al cabo de 3 km llegaremos a la entrada de Bolibar, pero, antes de entrar en el pueblecito, nos desviaremos a la derecha. El camino hacia arriba nos conducirá en un par de kilómetros hasta la famosa Colegiata de Ziortza, interesante monumento antiguo, que ha sido durante siglos un importante hospital-monasterio en el Camino de la Costa hacia Santiago.

Ahora sí, después de bajar de Ziortza, atravesaremos el pueblecito de donde es oriunda la familia del que fue Libertador de las Américas, pasando junto al admirable pórtico y distintos monumentos en honor del gran Simón Bolívar que le da nombre.

Mientras nos dirigimos a Markina, a un par de kilómetros tomaremos a la izquierda en el barrio de Iruzubieta, que durante largo tiempo ha hecho las funciones de encrucijada. Llegaremos, de esta manera a la "Universidad de la Pelota", esto es, a Markina, aunque, antes de entrar en ella y a la izquierda, todavía nos quedará una última ocasión para retomar la dirección hacia Aulesti o Santa Eufemia (si anteriormente no habéis podido, os recomendamos aprovechar esta oportunidad).

En esta localidad aficionada a la pelota tenéis un interesante casco viejo, y a lo largo y ancho de todo el municipio numerosas casas-torre, palacios y edificios religiosos dignos de ver. El más llamativo de ellos es el que veremos siguiendo la vía que conduce a la derecha mientras atravesamos el pueblo hacia Ondarroa-Lekeitio: la ermita de San Miguel de Arretxinaga (junto al probadero), con las tres gigantescas rocas que protegen la imagen del santo.

Después de salir de Markina, a 1,5 km pasaremos por Urberuaga, lugar donde, como su mismo nombre indica, "Lugar de Cálidas Aguas", surge agua natural y saludable (al pasar, veremos el antiguo balneario a la derecha).

Siempre en línea recta hacia Ondarroa, en el km 65,5 atravesaremos Berriatua. En su centro podemos visitar la casa-torre Aranzibia, de alrededor del año 1500 y una de las más destacables de Bizkaia, con numerosas ventanas ojivales dobles.

Finalizaremos nuestro recorrido otra vez en la costa, en Ondarroa, donde el ambiente pescador es palpable, gozando de su impresionante iglesia, el ambientado puerto y la tranquila playa; sin olvidar el puente Zubizarra o Viejo, por supuesto.